Hace poco te enseñábamos algunos consejos y trucos para el mantenimiento de la piscina en invierno, aprovechando que quedan ya pocos días de agosto (aunque algunos más de verano). Aunque durante el invierno vayas a echar de menos tu piscina de obra (sabemos que lo harás), no creas que vas a perderla de vista tan fácilmente: si quieres que el próximo verano vuelva a acompañarte con su agua refrescante y los buenos ratos en el jardín es imprescindible que sigas los consejos de mantenimiento que te ofrecemos.
Así puedes mantener la piscina en invierno
Si en nuestra anterior entrada hablábamos del cobertor de invierno, de la importancia de los alguicidas o la importancia del cloro, hoy le llega el turno a la importancia de otro aspecto del agua: el pH, cuyos valores deben mantenerse entre 7.2 y 7.6, no solo para evitar que aparezcan algas, sino también para que la piel no se irrite llegado el momento de volver al agua.
¿Y si tu piscina tiene cubierta? Debes saber que su mantenimiento será más sencillo, aunque por otro lado también necesita unos cuidados más regulares y rutinarios. Para limpiar las cubiertas es muy importante elegir los productos que sean adecuados: si no sabes cuáles son los idóneos para tu cubierta, es recomendable que lo consultes con el fabricante directamente.
Antes de comenzar con las acciones rutinarias para mantener tu piscina, si está cubierta, debes aclarar la cubierta con el fin de que la suciedad que pueda contener no caiga al agua cuando la muevas. Además, debes dosificar correctamente los materiales con los que estás limpiando la cubierta de tu piscina: no te olvides de secar una vez termines la rutina de limpieza. Y si quieres que la cubierta dure más tiempo, recuerda que usar un tratamiento preventivo anti-moho te puede ayudar mucho en esta tarea.
Siguiendo estos consejos podrás mantener tu piscina saludable para la próxima temporada de piscinas.