Cuando se acerca el verano y el momento de elegir vacaciones empieza a convertirse en una realidad, se suelen distinguir a dos tipos de personas: aquellos que prefieren el agua y aquellos que optan por la montaña. Pero dentro de los que prefieren el agua, existe una rivalidad: aquellos fanáticos de la playa, el mar y las olas, y los que prefieren remojarse en la tranquilidad de la piscina. Y es que aunque ambas opciones implican agua, hay diferencias entre playa y piscina que a sus más acérrimos fans siempre les gusta destacar. ¿Y tú, eres de playa o de piscina?
Si te gusta más la playa...
Si eres de esos que no dudan ni un instante en responder playa cuando les hacen la pregunta de cuál es su elección, ya sabes por qué, y es que las playas tienen ventajas únicas. Jugar con la arena, hacer castillos o cavar agujeros no es solo un divertimento para los más pequeños: los mayores también disfrutan ayudándoles.
Y para los que prefieren relajación, el sonido del mar es siempre una de las mejores opciones para desconectar, aunque dar un paseo por la orilla de la playa tiene el mismo efecto tranquilizador. Además, en el mar siempre se pueden practicar muchos más deportes acuáticos y pasar un rato divertido jugando con las olas.
¿O eres más de piscina?
Pero para algunos, todas las ventajas de la playa se convierten en desventajas porque sus preferencias están con la piscina. Muchos de los más fervientes defensores de las piscinas coinciden en su primera ventaja: no hay arena, es decir, el principal atractivo de la playa se convierte también en el principal atractivo de la piscina, pero a la inversa. A mucha gente no le gusta llenarse de arena, y aunque hay que limpiar la piscina con frecuencia, no encontrar arena merece la pena.
Otro de los aspectos que más se destacan a la hora de nombrar las virtudes de una piscina es el hecho de que todo el mundo sabe dónde está el fondo y qué hay en el fondo. Ni tiburones, ni algas, ni medusas, ni un calamar gigante que te arrastre de pronto a las profundidades: lo peor que puedes encontrar es una avispa en la piscina.